domingo, 28 de agosto de 2011

Belle de jour, de Buñuel





Esta obra de Buñuel la creo muy buena. Sale Catherine Deneuve, joven, rubia, glacial, fría como un bunker. También sale Paco Rabal, macho español, con voz ronca y huevos colganderos.

Catherine Deneuve aburrida de la vida de matrimonio, en la que su marido ejerce de médico y ella se aburre en casa, decide aventurarse por vías peligrosas y morbosas, decide acudir a un burdel para vender su cuerpo de 2 a 5. Al principio le cuesta, porque es duro y hay que acostarse con barrigudos y dejarse manosear, también tiene que hacer de dominadora y fustigar a algún cliente, y le cuesta, porque ella es fina y temerosa. Con la práctica se va soltando y se reencuentra a sí misma como mujer, consigue aumentar su estima, su fuerza, su autonomía. Su marido, el médico, no se entera de nada, él es muy correcto y cristianito y se peina de forma ordenada. Ella es ahora una zorra y le huele el coño a sudor. Las cosas han cambiado algo, aunque luego vuelven a su cauce, luego hay un accidente, un disparo y las cosas cambian.




Salen algunos sueños oníricos, alegóricos, caballos que tintinean, sexo sucio, humillaciones.
Hablan en francés. Yo la vi en VOSE, corazón malherido.



Un 8,83

No hay comentarios:

Publicar un comentario